STALINGRADO – Antony Beevor
Llevaba tiempo oyendo hablar de Antony Beevor cuando me topé con un par de sus libros, Stalingrado y Berlín. Me hice con ambos y decidí empezar por Stalingrado (por seguir un orden cualquiera). Siempre me cuesta un poco adaptarme a este tipo de libros; demasiados nombres de ciudades impronunciables, capitanes, generales, nombres de ejércitos y divisiones. Pero una vez me meto dentro, es difícil sacarme de ahí salvo con el final. Mi conclusión de Stalingrado: simplemente genial.
Evidentemente el libro cuenta la batalla de Stalingrado de la II Guerra Mundial y la gran catástrofe que supondría para rusos y alemanes, primero para unos y después y definitivamente para los otros.
Los comienzos son siempre, como decía antes, algo farragosos hasta que te familiarizas con la cantidad de datos que dan sentido a un momento histórico de semejante magnitud, pero una vez superados los primeros capítulos, básicos por otro lado para poder ponernos en situación sobre el conflicto, el libro se lee -como ya he visto apuntado por algún otro lado- como si fuera una novela. Beevor tiene un estilo realmente ágil y fluído de narración, sabiendo perfectamente encajar la cantidad de acontecimientos diferentes que se producían al mismo tiempo, valiéndose hábilmente de testimonios obtenidos bien personalmente o bien a través de incontables cartas o memorias.
Tal vez lo que más me ha llamado la atención leyendo Stalingrado, ha sido descubrir que un gran número de altos oficiales alemanes, al menos en el Ostfront, estaban en contra de Hitler y eran antinazis y que en un momento dado, incluso intentaron sin éxito organizar un golpe de estado contra Hitler. Pensaba que había una gran unión entre el partido nazi y el ejército.
Por otro lado, la gran conclusión una finalizada la lectura es el reafirmar las sospechas más que firmes que ya tenía de que Hitler estaba bastante más «pallá» que «pacá» y que en un altísimo porcentaje fue culpa suya la escandalosa derrota que sufrieron sus tropas en Rusia, que al fin y a la postre supusieron su caída en la guerra contra los aliados. Lo que no deja de sorprender es el ascendente que tenía sobre sus oficiales (o más bien el miedo que provocaba) para que ninguno fuera capaz de desobedecer sus órdenes una vez que estas se volvieron totalmente surrealistas y autodestructivas. No sé, como diría Obelix «estos alemeanes están locos».
Aparte de todo esto, el libro está lleno de anécdotas y comentarios, pero sobre todo, de sufrimiento y muerte. Cuesta imaginar hasta que punto puede aguantar el cuerpo humano en situaciones límite. Yo al menos no dejo de sorprenderme.
Conclusión: un libro que merece muchísimo la pena y que me ha servido para descubrir a este gran autor que es Antony Beevor. Por cierto, que en septiembre se lanza una nueva obra suya sobre la guerra civil española. Habrá que conseguirlo.
Por último y para cerrar este «longo-post», os dejo un extracto copiado directamente del libro. Tal vez sea el único punto de cierto humor que se pueda rescatar entre tanta desolación, pero a mí al menos me pareció ingenioso (espero que a nadie le ofenda). Se trata de un comunicado escrito por algunos soldados alemanes que repartían a todos aquellos que viajaban de permiso a Alemania. Dice así:
Nota para los que salen de permiso:
Debe usted recordar que está entrando en un país nacionalsocialista cuyas condiciones de vida son muy diferentes a las que se ha acostumbrado. Debe ser diplomático con los habitantes, adaptándose a sus costumbres, y evitar los hábitos que tanto le han llegado a gustar.
– La comida: no destruya el parqué ni suelos de otro tipo, porque las patatas se guardan en un lugar muy distinto.
– El toque de queda: si usted se olvida la llave, trate de abrir la puerta con un objeto de forma redonda. Sólo en casos de extrema urgencia use una granada.
– La defensa contra los partisanos: no es necesario pedirles a los civiles la contraseña ni abrir fuego al recibir una respuesta inexacta.
– La defensa contra los animales: los perros con minas atadas al cuerpo son un rasgo típico de la Unión Soviética. Los perros alemanes en el peor de los casos muerden, pero no explosionan. Dispararle a cada perro que usted vea, aunque es recomendable en la Unión Soviética, podría crear una mala impresión.
– La población civil: en Alemania el hecho de que alguien lleve ropa de mujer no significa que ella sea un partisano. Pero pese a esto, son peligrosas para todo el que esté de licencia del frente.
– Nota general: cuando esté de licencia en Alemania tenga cuidado de no hablar de la existencia paradisíaca en la Unión Soviética, no sea que todo el mundo quiera venir y malograr nuestra idílica comodidad.
Este comentario no alude al libro, pues no lo he leído. En todo caso, sí, Richar, así fue y así suele ser. Las adhesiones que se procuran los dictadores no siempre son inquebrantables, menos aún cuando los asuntos no marchan favorablemente. Los confesos incondicionales lo son circunstancialmente, por temor, por interés, por convicción quizá, pero cuando estas bases se resquebrajan la estructura se derrumba. Friedrich Paulus, el general que mandaba el VI Ejército alemán interviniente en el épico episodio, manifestaba a menudo poseer fe ciega en el F&uacuote;hrer, pero en el momento crucial no resulto ser sino medio tuerta. Cuando el 2 de febrero de 1943 capituló ante los rusos tuvo más presente la tutela de los restos de su ejército que las órdenes del Hitler, quien, por otra parte, le había nombrado Mariscal de Campo tres días antes con la advertencia de que ningún militar de ese rango se había rendido jamás. Hay que tener presente, además, que Hitler no era un estratega militar como Napoleón (pongo por caso), quien, a pesar de todo, fracasó igualmente en las estepas rusas. No es de extrañar, pues, que los auténticos militares alemanes comprendieran que sólo librándose del megalómano f&uacuote;hrer podrían poner fin a la guerra con una mínima dignidad. Por eso se fraguó la llamada <Conspiración del 20 de Julio de 1944> encabezada por el general Von Stauffenberg, a la que Paulus no quiso sumarse.
Cierto. Comenta el autor del libro que Hitler ascendió a Mariscal de Campo a Paulus con la seguridad de que este se suicidaría antes que rendirse y así poder tener el régimen nazi un nuevo «mito» sobre el que trabajar la propaganda y no, como sucedió, un «cobarde» que prefirió rendirse por el bien de sus hombres antes que volarse la cabeza por el bien de la imagen del F&uacuote;hrer.
Gracias por el comentario Anthos.
No me he leído este libro, aunque si la autobiografía de Von Paulus, un panfleto en el que trata de descargarse de toda la culpa del desastre del VI ejército. Casi seguro que el hombre no tuvo la culpa de la derrota pero era de esos generales de Hitler que no sabían plantarle cara. Curiosamente los mejores generales alemanes destacaron por su reticencia al nazismo, como el caso de Rommel, ¿quizás la inteligencia es condición necesaria para un buen generalato? (¿Patton contradice este frase?).
Pongámonos a jugar a Ciencia Ficción. Aunque el VI hubiera tomado Stalingrado, como se anunció triunfalmente durante horas, ¿que hubiera hecho durante el invierno ruso aislado a cientos de kilómetros de las columnas que luchaban frente a Moscú? ¿podría haber sido abastecido por aire? Habiendo sido trasladada la producción rusa al este (perder Stalingrado hubiera sido un golpe moral más que logístico) ¿hubiera acusado Rusia mortalmente la pérdida del petróleo del Cáucaso? Me da a mi que Stalin no se hubiera rendido tan fácil ni aún perdiendo Moscú.
Estoy contigo compluto. No creo que de haber caido Stalingrado los rusos se hubieran rendido ni por casualidad. Tal vez la obstinación era la única «virtud» de Stalin en esos momentos. Ahora no recuerdo quién lo dijo (me parece que fue un general alemán), pero parece que era bastante buen símil: «el ejército alemán en Rusia es como un elefante atacando un hormiguero. Puede matar a cientos, miles de hormigas, pero siempre habrá más y al final acabarán devorando al elefante hasta los huesos». Creo que era algo así, no recuerdo exactamente.
También estoy de acuerdo en la visión de Paulus. Por lo que describe en el libro, debía ser bastante sumiso a Hitler y sobre todo, debía tenerle un miedo atroz, aunque algo incongruentemente no acabara por ejecutar contra sí mismo la última orden del f&uacuote;hrer. No sé, parece algo contradictorio.
Y en cuanto a la derrota de los alemanes, insisto en que me parece que era inevitable. Ahora bien, si no hubieran seguido las órdenes tozudas e incongruentes de Hitler, muy posiblemente habrían sobrevivido muchos soldados alemanes que ni de lejos habrían quedado atrapados en el Kessel de Stalingrado. Creo que si hubieran detenido los inútiles ataques en ambos inviernos la cosa habría cambiado sustancialmente.
Pedazo de libro, si señor. De lo mejor que he leido sbre la IIGM.
Coincido en eso de no encontrar un sentido estratégico a la ciudad de Stalingrado. Por lo visto formaba parte del famoso movimiento que pretendía conectar el Caúcaso con Oriente Medio y de esa forma controlar el petróleo de la zona.
Aún asi se me antoja una maniobra demasiado ambiciosa. Yo creo que el gran problema alemán en el Ostfront eran las líneas de suministro: un frente amplísimo en profundidad y una línea de frente considerable; fácil avanzar con un ejército moderno y acorazado/ mecanizado y más cuando la entrada en las estepas de Ucrania fue un paseo ( por cierto: los ucranianos les recibian con el pal y la sal a los ejércitos de la Wermacht, el secular odio de éstos hacia los rusos no fue aprovechado por las cabezas pensantes del Reich), como decía, avances rápidos pero que precisaban líneas de suministro enormes. Las grandes cabalgadas en la estepa estaban a la orden del día pero eso que es tan básico en la guerra como es la logística no tuvo una planificación clara o careció totalmente de ella.
Por ejemplo la fanfarronada de Göering cuando garantizó el suministro aéreo del Kessel en pleno invierno.
Yo, particularmente, me estremecí al conocer el brutal desprecio de los soviéticos hacia sus propias tropas. Como bien decís los mismos alemanes se asombraban de ello, a falta de medios mecánicos millones de soldados al matadero sin ningn respeto hacía las minimas normas de orgnización táctica. En eso los alemanes les aventajaban.
A mi la guerra en el Este me resulta «fascinante», si se me permite la expresión. Porque fue realmente en el este donde se deciíó la guerra y de donde salió el más claro vencedor: la Unión Soviética; los aliados occidentales fueron, literalmente, burlados por papá Stalin.
Es inquietante comprobar, a toro pasado, como, cuando los soviéticos iban avanzando desde antes del Oder, ya estaban marcando lo que iba a ser su zona de influencia y el objetivo básico y primordial: Berlín. Y eso fue sin duda alguna una jugada política maestra de Stalin. Metidos hasta el corazón de Europa Central… mientras los «britons» y los «Joes» consideraban que era un objetivo sin valor estrégico o político.
Creo que ha sido el avance militar más importante de toda la Historia, pues configuró politicamente y territorialmente la Europa de después… y de ahora. Sin ese avance Europa habría sido algo completamente distinto… aunque tal vez estos comentarios se merecen más en una reseña sobre el libro de Berlín no tan bueno como este de Stalingrado, aunque también recomendable.
Y lo que más me interesa a mi: el sentido ideológico de la Guerra en el Este. Planteada por los nazis como, literalmente, una guerra de exterminio y que no hacía sino unir los dos principios básicos de la ideología del Reich:
Guerra y Raza.
Guerra en zonas ocupadas por etnias de infrahumanos: eslavos, judios…
que simplemente tenían que ser eliminados pues ocupaban territorios del famoso Espacio Vital.
Así como el trato y la ocupación en la Europa Occidental ( Francia, Holanda,Belgica…) fue relativamente correcto, excepto para la población judia, en el Este no existía consideración alguna hacía la población civil.
De hecho fue alli donde las Waffen SS consiguieron victorias y acciones muy sonadas… en un escenario muy propicio para ese tipo de unidades: Una Auténtica Guerra Racial.
Luego los soviéticos le dieron la vuelta a la tortilla acabando y exterminando con toda la Prusia Oriental y Septentrional via, por ejemplo, la violación masiva de mujeres arias…
Creo que este tema sobre la conexión entre ideologia y guerra debería ser estudiado en más profundidad. Excepto algún libro en ingles yo no he encontrado nada más. Si sabeís de alguno bueno se agradecerá.
A pesar de todo lo dicho, ir sentado en la torreta de un Mk IV cruzando la estepa ucraniana tuvo que ser una experiencia acongojante.
Les recibían, los ucranianos, con el «pan» se entiende.
Gracias Nando por tu extensa exposición, muy acertado. Efectivamente el siguiente libro en la serie a leer es el de la caída de Berlín, a ver qué tal…
Coincido plenamente en que el gran desastre provino de la falta de suministros, porque desde luego si es por la calidad de la tropa, la superioridad armamentísitca y la cantidad de soldados, los alemanes ganaban de calle, ¿no?
Y efectivamente, vas viendo poco a poco como a Hitler se le iba oxidando el cerebelo y se empecinaba en mantener el Kessel, a la par que los responsables de suministros prometían unas cantidades que eran literalmente imposibles de transportar debido a las condiciones.
Una anécdota curiosa, y no recuerdo si estaba en el libro o lo he visto en algún otro lado, es que en medio de el «puente aéreo» que intentaba llevar algo de alimento y recursos a los sitiados, se les coló (o lo que fuera) un avión con algo así como 2 toneladas de pimienta y no recuerdo que otra cosa totalmente absurda. Es decir, no había zampa, pero pimienta para sazonar 3 millones de comidas.
En fin, es un tema apasionante como dices tú ell de la conexión ideología-guerra, y en este caso también la conexión «Desvaríos de Hitler-Desatre del VI Ejército». ¿Qué opináis?
Yo estoy ahora leyendo el libro, al fin me decidí.
Además de la falta de suministros, el gran error es «entretenerse» y no lanzarse a por Moscú, por ejemplo, cuando lo tuvieron a tiro.
Otra cagada, correcto. Podríamos hacer un top ten de cagadas por las que no se conquistó Rusia. For example:
1.- Mala planificación y fatal ejecución del sistema de suministros.
2.- No lanzarse a por Moscú cuando lo tenían a tiro de piedra.
3.- Subestimar la cantidad y decisión del ejército ruso.
4.- Enfoscarse en Stalingrado por una cuestión meramente de orgullo.
5.- ¿Darle el mando de todo el ejército a Paulus? Esta no la tengo clara.
6.- … ¿más sugerencias?
Pues creo que estais cometiendo el 7º error que cometió Hitler y quizás el más importante subestimar la capacidad del ejército rojo. Y es que en el bando ruso tenemos a Zhukov uno de los más brillantes generales de la historia que desbarató, junto al ajército Siberiano, la ofensiva sobre Moscú. El equipamiento ruso tampoco era nada malo y ahí tenemos al estupendo T34 que sigue lanzando cañonazos por el mundo. Pero Hitler, tras la experiencia de la primera guerra mundial en Tannenberg (señores amantes de la táctica militar estudiense eso porque es la mayor ‘envolvente’ de la historia desde Cannas), los problemas para doblegar a Finlandia, etc. se creyó que la Biltzkrieg iba a desbaratar a Rusia tan fácilmente como a Francia. Como vosotros apuntais las líneas logísticas eran inmensas y Stalin se encargó bien de que así fueran trasladando la producción a Siberia. Lo único que quedaba era recular, esperar e ir viendo como el gran tortazo boche se iba convirtiendo en nada. El resto era echar carreras a lo Fernando Alonso por ver quien llegaba antes a Berlín.
Compluto, a la capacidad del ejército rojo me refería con el punto 3. Es cierto que el T34 era buen tanque, pero creo que en el resto de armamento eran mejor los alemanes, ¿no?
Tampoco quiero ponerme a pelear pero yo con el punto 3 (decisión y cantidad) entiendo que no incluyen aptitud ni calidad. Lo de la superioridad numérica rusa nadie lo dudaba pero Hitler estaba convencido del atraso tecnológico ruso y de la ineptitud de sus tropas cuando había aunténticas unidades de lujo, mandos más que competentes (cuando Francia o Inglaterra no los tuvieron nunca) y maravillas como el T34 (entre otros blindados), las temibles Katiushkas u ‘órganos de Stalin’, el IL-2 Sturmovik que poco tenía que envidiar a los cazas de la Luftwaffe, etc.
Vale, aceptamos pulpo como animal de compañía y dividimos por un lado decisión y cantidad y por otro aptitud y calidad.
Es posible que no dudaran de la superioridad numérica, pero desde luego no esperaban que aparecieran «tantas» tropas en ciertos momentos cruciales, especialmente cuando empezó la contraofensiva rusa que envolvió al VI ejército. Aunque seguramente todo eso venga porque Hitler no valoraba realmente el potencial de los rusos (como tú mencionas) al considerarlos inferiores.
Y otra pregunta que no aclara demasiado en el libro. Una vez el VI ejército queda cercado, no paran de prometerles que se enviarán tropas para ayudarles, cosa que evidentemente no sucede. ¿Cuáles fueron las causas? Es decir, ¿qué estaba pasando en el frente occidental -o donde sea- que impidió rescatar al VI ejército? ¿no había tropas relativamente cerca al norte y al sur de la zona sitiada?
Coincido en todas las «cagadas» hitlerianas y sobre todo subestimar al «peligro rojo» pero desde luego la superioridad tecnica alemana para mi es incuestionable, y no solo comparándolo con los soviéticos sino con el resto de los aliados.
Como lo que era el ejército alemán, esto es un ejército continental y de tierra, nadie podía hacerle frente. Otra cosa es la ayuda, masiva y después nunca reconocida, que recibieron los sovieticos en el Este por parte de EEUU.
Y otra cosa es tener que hacer frente a tal alianza ( EEUU, URSS, Reino Unido y su imperio… y que no nos pongan a Francia como ejemplo) y todos los recursos materiales de los que podían disponer.
Pero tecnicamente, en lo que es ejército de tierra, no hay comparación posible.
Armada y , una de las grandes cagadas alemanas, Aviación eso ya es oto cantar.
Por lo que Richard pregunta, la demora en romper el Kessel, solo recuerdo que Von Manstein y «papa» Hoth estaban como locos por entrar y romper el cerco al Sexto Ejército, de hecho me parece que hubo un avance muy tibio pero que acabó en nada.
Y yo,… je , je ,je… si hubiese sido Hitler… , hubiese machacado Moscú sin ningun tipo de contemplaciones.
Un gran libro ese, sin duda. Y «Berlín, 1945: la caída» tampoco le anda a la zaga. Sin embargo, he leído otros dos libros más de Beevor que me han defraudado: «La batalla de Creta» me aburrió, y «El misterio de Olga Chejova» me aburrió prrrrrrrrrofundamente.
Un matiz: a la conspiración del coronel (sólo coronel) Von Stauffenberg, von Paulus no se pudo unir porque fue posterior a su rendición. Esta conspiración fue fraguada, fundamentalmente, por altos mandos destinados en el Frente Occidental, y su idea era firmar el armisticio con las potencias occidentales y mantener la guerra con Rusia. Para ello, contaban con hacerse con una posición de resistencia dura en Francia que les pemitiera negociar en condiciones de igualdad con británicos y estadounidenses. Pero ojo: la guerra en el Este la consideraban apropiada.
En cuanto a las tensiones Ejército-Hitler, estas sólo se dieron cuando la guerra se volvió en contra de Alemania. Si bien la invasión de Francia y el ataque a Gran Bretaña se vieron con ciertas reticencias, la invasión de la URSS fue entusiásticamente recibida, y contó con el apoyo casi unánime de la Wehrmacht.
En cuanto a Rommel, ¡cuidadín! Las unidades bajo su mando no se vieron implicadas en crímenes de guerra, y en ese sentido era sin duda un hombre de honor: fueron muchos los rasgos de gallardía que demostró ante el enemigo vencido. Pero hay que tener en cuenta que no estuvo destinado nunca en el Frente del Este, donde se cometieron los grandes crímenes de la 2GM, y que apoyó a Hitler desde el principio. Fue jefe de su escolta durante la invasión de Polonia, y parece que simpatizaban mucho personalmente. También es cierto que, a partir de 1942-43, fue muy crítico con el «Fui», y que le dijo en su cara lo que opinaba de su conducción de la guerra. Pero fue a partir de entonces, o sea, a partir del momento en que se sabía que Alemania había perdido la guerra, cuando afloraron esas críticas. No antes.
Hay una anécdota de Rommel que a mí me gusta mucho, y que creo que le presenta como un hombre de honor. Cuando se tomó Tobruk, se hicieron muchos prisioneros de la Commowealth. Entre ellos, estaban los supervivientes de una división sudafricana. Los mandos blancos le pidieron que no mezclara en el campo de prisioneros a los combatientes blancos con los negros, a lo que Rommel les contestó que habían caído todos juntos como soldados, y que como soldados serían tratados todos ellos. Me parece una respuesta muy buena.
Un comentario tonto acerca de los permisos: al parecer, los soldados alemanes destinados en el Frente del Este eran reticentes a cogerse un permiso, pues sabían que las bajas entre los que regresaban de pasar unos días en casa eran altísimas, debido a que olvidaban las precauciones a tomar en el frente. Qué curioso, ¿no?
Por último, y si os interesa la batalla de Stalingrado, me permito recomendaros otro librito (aunque el de Beevor, para mí, es mejor): «La batalla por Stalingrado», de William Craig (Booket). Ojo, porque está publicada baratita en bolsillo y muy cara en tapa dura.
En fin, perdonad el rollo. Yo estoy en esta página, fundamentalmente, para aprender, pero a veces me disparo. Un afectuoso saludo.
Respondiendo a todos: claro que admito la superioridad alemana pero no comparto ‘la sensación’ generalizada de que los rusos eran unos paquetes con lanza y la invencible Wehrmacht la derrotó el invierno. A cada cual su justo mérito.
Germánico: yo creía que la idea de todo el alto mando alemán, Hitler incluido, era pactar un alto al fuego con Inglaterra (a la que consideraban hermanos de raza) y concentrarse en el frente oriental. De ahí el alocado y extraño ‘viaje’ de Hess que merece capítulo a parte. Una vez no conseguido, la idea era blindar las playas francesas y ver si se estrellaban Joes y Jerrys generando un debate acalorado en ambos parlamentos que desembocara en un pacto con Alemania. Aquí vuelve a jugar nuestro amigo Rommel con su mayor cagada, la negligente, a mi juicio, construcción de la Muralla del Atlántico (yo no se en que pensaba este hombre). Por estas cosas no entiendo el mito del invencible Erwin. Otro capítulo que merece hilo a parte.
Bueno, el prestigio de Rommel yo tampoco me lo explico muy bien. Fracasó en todas las misiones que se le encomendaron y, según parece, en su trayectoria no tuvo nunca muy en cuenta las cuestiones de suministros, lo que en un ámbito como el del desierto norteafricano, te lleva directo a la derrota. He leído recientemente una biografía suya:»Rommel, el Zorro del Desierto», de David Fraser (La Esfera de los Libros). Hasta 1943, resulta un texto muy pesado, pero de ahí en adelante me pareción muy interesante, sobre todo lo referido a la conspiración de la que hablamos. En cuanto al Frente Occidental, el autor sugiere, como ya se ha hecho varias veces con anterioridad, que los mandos alemanes facilitaron la invasión para que el F&uacuote;hrer se aviniese a negociar con los británicos. Este, efectivamente, nunca quiso a este país como un enemigo, ya que no sólo los consideraba «racialmente puros», sino que además creía que eran compatibles una Alemania dominando Europa y una Gran Bretaña dueña de un inmenso imperio colonial
Saludos.
Es verdad que Rommel fracasó en Africa ante los anglo-norteamericanos y que tampoco pudo evitar el desembarco de Normandía, pero fijate en una cosa Germánico, para Hitler el frente africano era secundario, y en la guerra eso significa que los suministros están en la cola a la hora del reparto, para los ingleses no era así, la derrota en este frente podía afectar al Imperio Británico, o sea, fueron a por todas. Y en cuanto a Normandía…estabamos en junio del 44, faltaba menos de un año para que el Tercer Reich cayera. Demasiadas dificultades para el desarrollo a favor de la guerra por muy buen militar que fuera Rommel, como así parece que fue reconocido por sus propios enemigos.
Saludos.
Yo no niego, David, que fuera bueno. Pero nunca estuvo en un frente importante, y, bueno… habría que haberlo visto en Rusia. Luchó en África y en el norte de Francia. Vale. Pero la guerra se luchó en otros frentes. En Rusia no estuvo, ni tampoco llegó vivo, desgraciadamente, a la defensa del Reich. En definitiva, y como opinión personal, me parece sobrevalorado. Pero reconozco que me equivoco con frecuencia.
Saludos.
También es verdad que durante mucho tiempo fue el niño mimado de Hitler, su juventud y sus primeros éxitos en los campos de batalla junto a su, en apariencia, identificación con el nacionalsocialismo hacian de él un prototipo de héroe que necesitaba Hitler para exportar su ideología y su confianza en la victoria militar…digamos que el régimen buscaba su «estrella militar» y Rommel reunía esas cualidades.
Saludos.
Me parecen muy interesantes todos los comentarios. No soy experto en el tema pero hay varias cosas que me quedaron de muchos libros que leí sobre la 2GM y que comparto. Una es que Hitler sufrió lo que varios militares experimentaron: sentir que eran invencibles. Desde esa posición todo era posible y ya no escuchaba a nadie que no estuviera totalmente de acuerdo con sus locuras y temas como la logística o la respuesta del enemigo no eran tenidas en cuenta (mas allá de que Hitler no era un buen estratega)
Otro aspecto que influyo en Stalingrado fue que junto al ejercito alemán había varias unidades de países como Rumania o Italia, que no estaban al nivel de Wehrmacht; o por ejemplo que grandes oficiales como Guderian o Manstein (que después de Sebastopol fue enviado al frente norte, cuando el destino de la guerra estaba en el sur) no estuvieran al mando de los ejercitos del sur; o que no se respetara el plan original de Blau, cambiando Hitler y algunos de sus comandantes objetivos, retirando del frente unidades que eran necesarias, separar sus puntas de lanza y hacer imposible el abastecimiento; que Hitler no respetase la capacidad del Ejerciro Rojo y sobrevalorara el potencial de sus fuerzas armadas, etc.
Son muchas las causantes de la derrota en Stalingrado del ejercito alemán, pero creo que la principal fue que Hitler estuviese al mando del OKH y del OKW, o sea, la Wehrmacht en el frente oriental.
Cambiando de tema, creo que Rommel fue un gran comandante: la acción con la 7 Panzer en Francia y la conquista de Tobruk creo hablan de su brillantez para actuar en el campo de batalla.
Saludos
Pues para no ser un experto, parece que dominas bastante el tema :-)
¡Un saludo y bienvenido al blog, Stuka!
PD: no aporto a tus comentarios porque yo sí que no soy un experto en el tema.
Tampoco es que yo sea un experto en estrategia militar, pero creo que en lo que se refiere a la ayuda rumana en el frente de Stalingrado hay un poco de mito en cuanto a su debilidad. Más bien habría que comentar que los rumanos, a pesar de sus limitaciones materiales, hicieron alarde de valentía, pero sus recursos en hombres y material eran inferiores a la Whermacht, los cuales reservaban sus mejores equipos armados para su propia defensa, dejando a rumanos, húngaros etc..defendiendo sectores amplios de frente con unas limitaciones armamentísticas importantes.
Un saludo.
que buenos comentarios ustedes si que saben yo ando recien aprendiendo y estos parrafos ayudan mucho.
Desde mi punto de vista Rommel fue un gran comandante por su campaña en Africa respecto a su hazaña en francia no lei casi nada.
Y Hitler es un cojudo por no haber atacado en su debido momento a Rusia.
saludos
Dios sabrá lo que es un cojudo….
Creo que es una especie de torrezno…
Es la superposición de cojo y coj*nudo. Digo yo.
CREO, COMO ESTOY SEGURO, QUE LA DERROTA ALEMANA SE DEBIO AMULTIPLES HECHOS, PERO UNO DE LOS ACTOS QUE ESTUVO PRESENTE EN LA LUCHA, FUE EL ALTO GRADO DE AMOR PATRIO Y LA ENORME CAPACIDAD QUE EL BRINDA A LOS COMBATIENTES SU CONCEPCIÓN DEL MUNDO. EL MARXISMO BRINDA A CUALQUIER JEFE MILITAR, CIERTA VISIÓN QUE LES FALTA A LOSENEMIGOS DE ESTE. STALINGRADO FUE LA CUNA DE LA VICTORIA SOVIETICA, TODA LA ESTRATEGIA DE CLASEWITZ FUE UN FRACASO FRENTE A LA IDALGIA DEL GUERRILLERO RUSO. lA GUERRA DE GUERILLAS JÁMÁS HA SIDO COMPRENDIDA POR LOS EJERCITOS CONVENCIONALES DE DIS QUE MUNDO LIBRE. DEBE ESTUDIARSE A SHUCOV.
Otro que chilla con las mayúsculas…
Para ahondar en este tema recomiendo a todos la lectura de «Lost Victories» de Erich Von Manstein, que contiene un capítulo muy extenso sobre Stalingrado y con reflexiones del, para mi, mejor general Aleman de la segunda guerra mundial, sobre las causas del fracaso en el frente ruso.
Lamentablemente no se si el libro está publicado en castellano, quizás alguno de los múltiples entendidos de esta página pueda ayudar en eso.
Vaya, ya veo que Lost Victories tiene su propia reseña en esta página, supongo que sabran perdonar a un recién llegado.
No hay nada que perdonar, Fabio. Todos hemos sido noveles. E incluso a los que ya llevamos algún tiempo por aquí nos sigue pasando de tanto en cuando. Siéntete bienvenido a esta jaula de grillos y anímate a comentar más libros y a compartir tus impresiones. Los que por aquí andamos estaremos encantados de tener un amigo más para debatir, comentar ¡e incluso disputar, llegado el caso!
Y, con permiso de Koenig, para facilitar la labor, dejo en enlace a la obra susodicha:
https://www.hislibris.com/?p=337
Un saludo de bienvenida.
Permiso concedido.
Bienvenido al lío «Cunctator».
La defensa de Stalingrado fue frenética, pero no olvidemos que la férrea resistencia soviética se vio claramente condicionada por la rigidez con la que se trató al soldado raso soviético. Solamente en esta batalla el Ejercito Rojo fusiló a 13.500 hombres de su propio bando por cobardía o intento de deserción. Este número equivaldría al de toda una división de un ejército.
Un saludo.
De una división de un ejército soviético, las alemanas tenían 16.000 hombres, aunque el stándard era de casi 20.000.
Siguiendo un poquito con lo que fue esta batalla me gusataría mencionar dos nombres de personajes famosos que cayeron en esta cruenta batalla: uno de ellos fue el hermano pequeño de Albert Speer, el arquitecto de Hitler; en el bando soviético cayó el hijo de la Pasionaria, Ruben Ruiz.
Un saludo.
He leído ambos libros y me parecieron excelentes.
Creo que lo mas impactante fue la vuelta de mano de los rusos sobre Berlín. Los Alemanes pagaron duramente su osadía.
Hitler se equivoco al 100% en querer tomar Stalingrado por una razón meramente simbolica. Lo segundo, subestimo estupidamente al ejercito rojo creyendo que lo tenía derrotado. Mas encima el clima los revento.
Si alguien tiene algún dato de libros similares les agradeceré me contacten (el_pitra@hotmail.com)
Por evitar confusiones, me permito advertir que el anterior Rodrigo no es el que frecuenta el sitio.
Saludos.
Stalingrado, ciertamente es un libro muy bueno, que pretende que toda la multiplicidad de datos que contiene tengan un sustento, bien sea de entrevistas directas, archivos, referencias epistolares o literarias . Se lee (pese a la gran cantidad de datos) muy fácil pero no me termina de convencer la posición ideológica de su autor, encuentro cierta falta de objetividad en las apreciaciones personales del autor, describe situaciones análogas en los ejércitos enfrentados, pero las critica con tamices diferentes. Advierto una gran admiración por el ejercito alemán, quien fue el agresor y quien cometió todo tipo de crímenes indecibles en territorio soviético, pareciere que los nazis fueran elementos aislados de la nación Alemana (Hitler el malo que condujo al buen ejercito a la catástrofe); por otro lado trata de manera muy dura a la nación agredida, tratando de crear brechas entre su ejercito inhumano y el heroico pueblo. Entonces el pueblo desorganizado y con dirigentes casi tan malos como los nazis, por que ganaron la batalla y después la guerra ?
He leído todos e cada uno de los comentarios publicados en esta página, alho que me ha dejado profundamente satisfecho debido al alto nivel de conocimiento e información de los participantes.
Reconozco la alta capacidad tecnológica y organizacional de los nazistas, pero una cosa que siempre me dejó intrigado y curioso es saber cómo Hitler podría ingeniárselas para enfrentar la capacidad humana (número de soldados) que tenía contra si, en una guerra que unió a adversarios como el Reino Unido, Estados Unidos y la Unión Soviética, además de las resistencias.
Alemania, como cualquier otro país, debía tener un límite de tropas, lo que se probó en la Batalla de Berlín, cuando hasta chicos particparon de la defensa de la ciudad.
Resumiendo, hasta dónde podría llegar el avance nazista? Sería realmente capaz de ir hasta el Oriente Medio?
Amigos no olvidar la población. Rusia (URRSS en la época) tenia tres veces más población que Alemania. Yo creo que a los alemanes en general, nazis o no, les bajó al menos en esa época, un delirio de grandeza y se olvidaron de la realidad y de la experiencia napoleónica. En cuanto al olvidado aporte norteamericano este tenia que ver también con usar a la URSS como yunque y ojalá que esta se desangrara lo más posible desangrando además a los nazis…. Algunos datos: TODOS los bototos usados por el ejército Rojo eran Made in Usa. Casi TODOS los camiones con sus repuestos y neumáticos también. Creo que Rusia no habría ganado la Guerra sin esos «detalles». Ademas USA proveyó de materias primas estratégicas para hacer armas, os es cañones y balas. O sea agreguemos otro error nazi: haberle declarado la Guerra a USA.
estoy intersado en conseguir los libros de Stalingrado y el de berlin la caída, de Beevor, puede alguien decirme en donde los puedo encontrar en México.
ME GUSTARIA SABER QUE PIENSAN SOBRE EL APARENTE ERROR DEL AUTOR RESPECTO A GOTTFRIED VON BISMARCK, DADO QUE SOSTIENE QUE RESULTO PRISIONERO EN STALINGRADO Y APARANTEMENTE NO FUE DE ESA MANERA
Lo acabo de terminar de leer. Fantástico. Una gozada.
No he leído todos los comentarios ya que son muchos.
A mí lo que me sorprende más del libro es la capacidad humana para hacer autenticas locuras y estupideces en nombre de algo o alguien.
La «alegría » para morir y matar en nombre de algo o alguien, una idea o un sistema; me parece alucinante…
Por otra parte el desprecio por el sufrimiento y la vida (muerte más bien) por parte de los mandos tanto políticos como militares.
Nunca dejara de sorprenderme el ser humano.
Buenas tardes:
Suzzuki: cuando te aficionas a la historia militar siempre llega el momento que te preguntas el por qué de tantas guerras y de tanto sufrimiento, unas tras otras, cada vez mas destructivas y voraces, sin el que el hombre sea capaz de aprender de esa experiencia. ¿Dónde está la respuesta?, quizás en el vieto…
Lo cierto es que en la tierra hay actualmente más de 140 guerras, algunas muy «pequeñas», pero cualitativamente son todas igual de grandes por el sufrimiento que generan. Los «occidentales» de Europa y unos pocos más disfrutamos de un «entorno de paz» que apenas podemos exportar, pero pienso que es una situación temporal y que pronto dará a su fin y volveremos a mostrarnos como somos, seres humanos más políticos que sociales… Pero sólo es mi humilde opinión.
Cordialmente.
wenas a todos, el libro lo leí hace 3 años y me dejó pasmado por la cantidad de detalles y a la vez ágil de leer, los sufrimientos y penurias de ambos bandos en esa confrontación.
hitler cometió tantos errores… la invasión de rusia sin haber acabado antes con los «tommys», toda vez comenzada la operación barbarroja, cometió otro gran error como fue no haber conquistado moscú, cuando pasó el invierno reanudaron la ofensiva y se puso en funcionamiento la operación «blau» destinando el grp de ejércitos sur a la conquista de los pozos del cáucaso, separándolos posteriormente en ejército A (cáucaso) y B (toma de stalingrado).
La impaciencia de hitler hizo que atacaran a la vez sus respectivos objetivos, en vez de esperar a tomar los pozos primero, para tener las reservas de fuel que tanto necesitaban las panzerdivisionen y su blitzkrieg. Después el cabo bohemio, se empecinó en tomar la ciudad de Stalin en vez de cercarla y rebasarla, ya sabemos que en la orilla del volga es lo máximo a lo que se adentró la Wehrmacht, pero si hubiese poseido el combustible necesario.. otro gallo hubiese cantado creo yo.
La inapropiada ropa para el invierno, fue otro error, o no dejar a Paulus retirarse cuando aún estaban en condiciones de romper el «kessel».
Alguien ha dicho que Rommel estaba sobrevalorado.. bueno para empezar.. en casi todas las batallas por n decir TODAS, en las que intervino fue en inferioridad de recursos y hombres, Montgomery no se atrevió a pasar a la ofensiva hasta que no dispuso de una ventaja de 7 a 1, en hombres, carros etc..
Buenas noches:
Se me antoja que no acabó antes con los Tommies porque no pudo.
Moscú no era tan importante.
La ropa de invierno y la extensión de las operaciones en Rusia sí.
El cabo era un militar lamentable.
En fin asertos de domingo.
Atte.
Hola a todos, introduzco mis humildes reflexiones por primera vez en el sitio. Me gusta leer sobre historia en general, incluida la militar por supuesto.coincido con las reflexiones de suzzuki sobre el ser humano y su capacidad de despreciar la vida de millones en aras de una ideologia,religión, un lider, etc. Hitler fue uno de tantos otros personajes que han creído y sentido ser predestinados a conquistar y dominar el mundo por la via militar,a costa de la vida de tantos,Alejandro,Gengis kan,Napoleón,etc. mas me sorprende ver como los humanos somos capaces de someternos en masa ante alguien que nos proyecta conviccion,seguridad,aunque este sea un desquiciado,y nos mande a ser degollados o degolladores al matadero.no cabe duda que somos los prototipos del reino animal…pero bien con respecto a la guerra, Hitler ´´Volaba tan alto mentalmente´´ en su mejor momento , y estaba tan convencido en la capacidad y superioridad tecnica y humana de su tropa, que pensó que todo lo tenía a su alcance,y menospreció no solo a los soviéticos.si no que a todo el mundo evidentemente,ya que cometió el peor error que puede cometer alguien con buen sentido común,ya no digamos un estratega militar,como pelearse con todos los enemigos al mismo tiempo, si hubiera resuelto los conflictos uno a la vez,claro que otra hubiera sido la historia,claro que un solo frente aleman hubiera hecho historia a la URSS o a la misma Inglaterra desde esa epoca. pero tan sencillo de comprender según el dicho popular,el que mucho abarca poco aprieta..Pero Hitler estaba en el climax de su delirio, como en el que han estado tantos conquistadores,que de hecho han realizado así sus ´´hazañas´´ si me permiten llamarlas así, en el que tienen una idea,y solo falta creer férreamente en ella a expensas de la razón y la lógica,para que otros terminen creyéndosela también, como para ir como borregos a morir o matar en su nombre…Tipico comportamiento humano…diría un extraterrestre
Hola les hago una consulta, estoy escribiendo una obra teatral basada en Stalingrado y la Orden Nº 227 que dictará Stalin (Ni un paso atrás) y necesito material sobre la realidad social de Stalingrado entre abril y agosto del 1942. Conocen algun texto que me pueda aportar info. Gracias.
Es buen libro, que enseña a no cometer errores y a velar por la paz
Recién reseñada, una obra altamente recomendable… Con permiso http://elpuentelejano.blogspot.com.es/2016/01/stalingrado-antony-beevor.html?m=1